Yo, el secretario, José Manuel Silvosa Tallón, doy fe y testimonio que en este juzgado se siguen autos de juicio ejecutivo 209/1995, seguido a instancia de Banco Pastor, S.A., representado por el procurador Regueiro Muñoz, contra O Marquiño S.L., Manuel Castro Barreiro, Josefina Fernández Guerra y Consuelo Guerra Andrade, en los que se ha dictado sentencia cuyo fallo es el siguiente:

«Que debo mandar y mando seguir adelante la ejecución despachada hasta hacer trance y remate de los bienes embargados a O Marquiño S.L., Manuel Castro Barreiro, Josefina Fernández Guerra y Consuelo Guerra Andrade, y con su producto entero y cumplido pago a la parte actora, de las responsabilidades por que se despachó la ejecución, la cantidad de 1.816.270 pesetas, importe de principal y 1.000.000 presupuestadas para intereses pactados hasta la fecha invocada y además al pago de los intereses de demora

también pactados y las costas, a cuyo pago debo condenar y condeno expresamente a la parte demandada.

Contra esta sentencia podrá interponerse en este juzgado recurso de apelación en el plazo de cinco días a contar desde su notificación.

Así, por esta mi sentencia, de la que se expedirá testimonio para su unión a autos, lo pronuncio, mando y firmo.»

Y para que sirva de notificación en forma a los demandados en paradero desconocido O Marquiño, S.L., expido el presente edicto en Arzúa a 22 de febrero de 1996.

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