Yo, Begoña Arroyo Martín, secretaria del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número seis de Santiago de Compostela y su partido, da fe y testimonio:

Que en este juzgado se siguen autos de juicio verbal de faltas nº 117/2000, por coacciones, en los que ha recaído sentencia cuyo encabezamiento y fallo son del tenor literal siguiente:

«En Santiago de Compostela, a 13 de octubre de 2000.

José Gómez Rey, magistrado-juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número seis de este partido pronuncia la siguiente

Sentencia. Vistos los presentes autos de juicio verbal de faltas nº 117/2000, seguidos en este juzgado sobre coacciones, en los que son partes, el denunciante Roberto Parrado Santos; y el denunciado Javier Ouro Rodríguez.

Fallo que debo absolver y absuelvo libremente a Javier Ouro Rodríguez de la falta de coacciones por la que fue denunciado, declarando de oficio las costas procesales.

Contra la presente resolución cabe interponer recurso de apelación ante este juzgado, para la Audiencia Provincial, en el plazo de cinco días a partir del siguiente al de su notificación, en la forma que disponen los artículos 795 y 796 de la Ley de enjuiciamiento criminal.

Así, por esta mi sentencia, de la que se llevará certificación literal a los autos, definitivamente juzgando en primera instancia, lo pronuncio, mando y firmo».

Y para que así conste y sirva de notificación a Roberto Ramiro Parrado, en paradero desconocido, expido, sello y firmo la presente cédula en Santiago de Compostela, a veinticinco de enero de dos mil uno.

La secretaria judicial

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