Yo, Evelia Marcos Arroyo, jueza del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de esta villa y su partido, hago saber que en juicio de faltas número 129/1995 de este juzgado, se ha dictado sentencia, cuyo encabezamiento y parte dispositiva dice así:
«En Padrón a 25 de marzo de 1996.
Vistos por José Manuel Vitela Lage, juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Padrón, los autos de juicio de faltas 129/1995, por malos tratos, con intervención del Ministerio Fiscal en representación de la acción pública, siendo parte, como denunciante, María Yolanda López Otero, y como denunciado, Carlos D. Castro Villar, cuyas circunstancias personales constan en autos, en base a los siguientes decido que debo absolver y absuelvo a Carlos Castro Villar, declarando de oficio las costas procesales.
Notifíquese la presente resolución a las partes, haciéndoles saber que la misma no es firme y contra ella cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial en cinco días.
Así, por esta mi sentencia, lo pronuncio, mando y firmo».
Dicha sentencia no es firme y podrá interponerse contra la misma recurso de apelación en el plazo de cinco días siguientes a su notificación.
Y para su publicación y que sirva de notificación al demandado Carlos Calvo Villar.
Dado en Padrón a diecinueve de octubre de mil novecientos noventa y ocho.
El juez
Rubricado
El secretario
Rubricado