María Begoña Arroyo Martín, secretaria del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número seis de

Santiago de Compostela, doy fe y testimonio de que en los autos de juicio ejecutivo de que se hará mérito, recayó la sentencia que contiene el encabezamiento y fallo del tenor literal siguiente:

«Sentencia. En Santiago de Compostela a veinte de octubre de mil novecientos noventa y cinco. Vistos por Gustavo Adolfo Martín Castañeda, magistrado-juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número seis de Santiago de Compostela, los presentes autos de juicio ejecutivo nº 151/1995, promovidos por el procurador García Píccoli Atanes, en nombre y representación del Banco Central Hispano Americano, S.A., asistido por la letrada Sonia Rodríguez Arroyo, contra Fernando Tobío Martínez y María del Carmen Calviño Fosado, con domicilio en Ponte de Sar, 89, Santiago de Compostela y declarados en rebeldía; y fallo que debo mandar y mando seguir adelante la ejecución despachada, hacer trance y remate de los bienes embargados a Fernando Tobío Martínez y María del Carmen Calviño Fosado, y con su producto, entero y cumplido pago a la parte actora de la cantidad de 189.327 ptas. importe del principal y la suma de 100.000 ptas. para intereses y costas, a cuyo pago debo condenar y condeno a

los demandados. Y dada la rebeldía de los demandados, notifíqueseles en la forma prevenida en la ley, si no se pidiera dentro de los tres días siguientes la notificación personal.

Esta resolución no es firme y contra la misma podrá interponerse, en este juzgado recurso de apelación, en el término de cinco días, a contar desde su notificación».

Y para que sirva de notificación a los demandados rebeldes, se expide el presente edicto en Santiago de Compostela a nueve de noviembre de mil novecientos noventa y cinco.

La secretaria

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