El Servicio Gallego de Salud viene de firmar en la Conferencia de las Naciones Unidas la Carta abierta de la comunidad médica y sanitaria mundial para instar a la presidencia de la COP28 y los líderes mundiales sobre la necesidad de eliminar el empleo de combustibles fósiles.

El texto firmado por el Sergas recuerda la necesidad de acabar con la dependencia de este tipo de combustibles para mejorar las perspectivas de salud de la población mundial.

Así, ya en la Estrategia de Economía Circular del Servicio Gallego de Salud, en su primero eje vinculado a los recursos y materias primas, establece la necesidad de disminuir el consumo los recursos y, dentro de la misma, incluye diferentes líneas de acción que van desde la merma del consumos de combustibles fósiles a la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones del Sergas, o al relevo progresivo de las materias primas con mayor impacto en medio ambiente.

Con esta finalidad, la Xunta de Galilcia licitó este año un contrato por valor de 1,5 millones de euros para introducir energías renovables en 14 centros de salud gallegos, a través del relevo de la calefacción convencional por sistemas de aerotermia o biomasa.

Del mismo modo, el Sergas ya redujo el consumo de combustibles fósiles con una inversión de 7 millones de euros en las envolventes térmicas del hospital del Meixoeiro o con la puesta en marcha en el Hospital Álvaro Cunqueiro de 750 paneles fotovoltaicos. En lo que alcanza a más actuaciones de dotación de energía solar en los centros sanitarios o de iniciativas contra lo cambio climático, destaca la reciente licitación de las obras vinculadas al proyecto Life Resystal en los hospitales de Ourense.

En esta misma línea, el Ejecutivo gallego continua a trabajar en los objetivos de la Agenda 2030 en cuanto al desarrollo sostenible, nombradamente, en los referidos a: Salud y Bienestar; energía accesible y no contaminante; ciudad y comunidades sostenibles; producción y consumo responsable; acción por el clima y vida de los ecosistemas terrestres.