La directora xeral de Xuventude, Participación e Voluntariado, Cristina Pichel, visitó hoy los jóvenes participantes en el campo de voluntariado de modalidad ambiental ‘A terra que habita no mar', en el ayuntamiento de O Grove.

Esta actividad trata de poner en valor la riqueza medioambiental del ayuntamiento, zona de parada de aves en las migraciones europeas y euroafricanas. Los participantes llevan a cabo acciones como la limpieza y extracción de especies invasoras, la recuperación de estructuras en la Ruta dos Burros Fariñeiros, en la Aldea dos Grobits y en los puntos de observación ornitológica. Además, publican contenido informativo en redes sociales que sirve para la posterior divulgación mediante códigos QR, filmaron un vídeo sobre la problemática medioambiental y sensibilizan a grupos de escolares, entre otras tareas.

Adicionalmente a las labores medioambientales, los once participantes -de entre 18 y 30 años y procedentes de diversas comunidades autónomas- disfrutan de tiempo de ocio con excursiones, actividades de chapuzón, kayak o rocódromo.

Este campo de voluntariado es el último de una exitosa campaña de verano en la que Galicia acogió 46 campos de voluntariado, cuatro de ellos de nueva creación, que sumaron un total de 730 plazas.

Amplia oferta de actividades

Los campos de voluntariado de la Xunta acogen jóvenes de 18 a 30 años de edad que provienen de Galicia, de varias comunidades autonómicas y de diferentes países del extranjero. La campaña de verano de este año 2023 fue la más amplia de la historia, con más de 11.200 plazas en distintas actividades, pero también la más variada y accesible. En ella se ofrecieron actividades para todas las edades y gustos como campamentos, campos de voluntariado, minicampamentos o intercambios con otras Comunidades. El objetivo era que la juventud pasara unos días de aprendizaje y diversión y que los padres contaran con un servicio de conciliación para esta época estival.