La Xunta recibió un total de 55 candidaturas para participar en la XIV edición de los Premios al desarrollo rural, que organiza cada año la Consellería de Medio Rural a través de la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural. Estos galardones están dotados con hasta 80.000 euros, la razón de 10.000 euros para cada uno de los ganadores participantes en las ocho categorías establecidas.

En este sentido, cabe indicar que se recibieron las siguientes candidaturas: ocho en la categoría de juventud, para personas de menos de 40 años; tres en la de paisaje rural, para iniciativas de intervención, mejora y puesta en valor de los paisajes rurales productivos de Galicia en las que se integren los elementos y valores culturales y naturales con el aprovechamiento agrario; 10 en la de interés social, para aquellos proyectos orientados a la integración de colectivos desfavorecidos o del cuidado de los mayores; 10 en la categoría de turismo; ocho en la del sector agroganadero; 10 en la de mujeres, para iniciativas llevadas a cabo o encabezadas por ellas; tres en la de innovación tecnológica y, por último, otras tres en la de recuperación y puesta en valor de la tierra agraria.

Así, el objetivo de estos premios es reconocer por parte del Gobierno gallego aquellas iniciativas que contribuyan de manera singular a promocionar el medio rural y a generar una sociedad rural más dinámica y cohesionada, tal y como se explica en las bases y en la convocatoria.

De hecho, las bases establecen que cada uno de los premiados recibirá un diploma y una dotación en metálico de 10.000 euros, que deberá reinvertir en la iniciativa ganadora para realizar mejoras, apostar por la conservación o ejecutar actuaciones complementarias.

Criterios de valoración

Con respecto a los criterios de valoración, se incluyen la aportación de la iniciativa al objeto de la categoría en la que participa, a la actividad económica del territorio en que se desarrolla, a la creación de empleo, a la incorporación e inserción laboral de la mujer e implicación en políticas de igualdad, así como el grado de contribución a la inserción de colectivos o personas socialmente desfavorecidas.

También se valora el grado de apoyo social, de consolidación y de sostenibilidad de la iniciativa desde el punto de vista económico, medioambiental y sociocultural, así como su interés desde el punto de vista de la innovación, excelencia y originalidad.