Santiago de Compostela, 20 de febrero de 2023 La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade publica hoy en el Diario Oficial de Galicia la normativa del Plan Hidrolóxico de Galicia-Costa 2021-2027, en la que se recogen las directrices de este instrumento fundamental para la gestión del agua en Galicia durante los próximos años, y fija como objetivo lograr que el 100% de las masas de agua de la cuenca consigan el buen estado.

El Plan Hidrolóxico de Galicia, que entró en vigor el pasado 10 de febrero con su publicación en el Boletín Oficial del Estado, se erige como una hoja de ruta con rango de ley. Fue aprobado por parte del Consello da Xunta hace ya ocho meses, a pesar de que no fue hasta el pasado 24 de enero cuando fue autorizado en Consejo de Ministros por parte del Gobierno central.

Hace falta recordar que la demora del Gobierno central en la aprobación de los planes hidrológicos nacionales ha derivado en la apertura de un expediente de infracción a España por parte de la Comisión Europea por no haber finalizado la revisión de los planes en el plazo establecido por la Directiva Marco del agua.

El nuevo Plan Hidrolóxico de Galicia-Costa incluye 79 medidas de carácter normativo para establecer normas adaptadas a las problemáticas actuales del uso del agua, a la gestión más sostenible, al contexto climático y a garantizar un mejor cumplimiento de los objetivos ambientales. En el siguiente enlace al DOG puede consultarse la información: https://acortar.link/fbiFat ,

Galicia, que fue comunidad pionera al aprobar su plan de cuenca, dispone así de un instrumento de planificación que tiene vigencia de 6 años, en el que se tiene muy en cuenta a necesidad de adaptar la gestión del agua al nuevo contexto de cambio climático, tanto en lo relativo al riesgo de inundaciones como a los episodios de sequía.

También permitirá velar por la calidad de todos los ríos que nacen y mueren en la comunidad, de las aguas costeras asociadas y de las aguas de transición.

El Plan hidrolóxico recoge además un programa de 212 medidas y 1.885 M€ de inversión.  El mayor esfuerzo económico se destinará a las actividades más importantes para la calidad de las aguas: el saneamiento y la depuración, previendo una movilización de 973 M€; y el abastecimiento, con más de 560 M€, absorbiendo el 80% del presupuesto del plan.

Más en concreto, un total de 110 de las 212 medidas previstas con carácter de inversiones dispondrán de financiación autonómica, es decir, más de 605 M€. Por lo tanto, la Xunta asume el 52% de las medidas recogidas en el plan y el 63% de la inversión prevista.

Preservación y protección de las masas de agua

El plan incluye novedades normativas para la preservación de las masas de agua, como la limitación de plantaciones en zonas de servidumbre del dominio público hidráulico y de trabajos que supongan el deterioro de los ecosistemas de los ríos, fomentando la vegetación de ribera.

Así, se darán facilidades a los ciudadanos para realizar plantaciones, siembras o trabajos de mantenimiento en zona de policía pero fuera de servidumbre, labores que podrán hacerse sin autorización de Augas de Galicia.

El plan también recoge una mayor protección de las masas del agua con una mejor gestión de los purines, estableciendo la obligatoriedad de impermeabilizar su almacenamiento y cubrirlos adecuadamente, para evitar posibles vertidos al medio.

En cuanto a los caudales ecológicos, se incorporan diversas previsiones para contribuir a clarificar su aplicación así como el control de su cumplimiento, pues estos caudales son de aplicación directa e inmediata y, por lo tanto, de obligado cumplimiento.

Se establecerán, además, medidas contra el uso abusivo del agua.

Participación pública y consenso

La Xunta realizó un ingente trabajo de campo para elaborar el nuevo plan, que incluyó la revisión y actualización del plan anterior (2015-2021), realizando un completo análisis y primando la participación.

Para esto, se acometieron 55.000 analíticas en las masas de agua con distintos parámetros, físico-químicos, biológico y hidromorfológicos, para evaluar su estado y su calidad.

Además se fomentó la participación pública, con la divulgación de los contenidos y la sensibilización sobre la importancia de la protección de los recursos hídricos, consiguiendo un consenso mayoritario con la incorporación de aportaciones recibidas.