La conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, supervisó hoy in situ la nueva infraestructura
La Xunta reabre el puente de Ponte Arnelas tras las obras de reconstrucción, con una inversión de 5,3 millones de euros
Martínez Allegue destaca el resultado de esta intervención que "contribuirá a mejorar el tráfico, con mayor seguridad, entre los ayuntamientos, de Vilanova y Ribadumia"
Vilanova de Arousa (Pontevedra), 20 de junio de 2024
La Xunta reabrió hoy el puente de Ponte Arnelas tras las obras de reconstrucción, con una inversión de 5,3 millones de euros.
La conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, junto con el director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez, y el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Agustín Reguera, supervisó hoy el remate de esta obra.
Martínez Allegue destacó el resultado de los trabajos realizados en esta ponte reconstruida que, tal y como subrayó, "sin duda contribuirá a mejorar el tráfico, con mayor seguridad, entre estos dos ayuntamientos, de Vilanova de Arousa y Ribadumia".
La conselleira puso en valor el cumplimiento del compromiso de la Xunta trabajando con la máxima diligencia desde el primero momento, desde el día 18 de abril, que tuvo que cerrarse el puente de Santa Marta, tras detectarse daños en varias péndolas causados por la corrosión, lo que hizo que la calzada cediera parcialmente.
Así, según recordó, desde el primero momento se trabajó, primero, para evitar que la situación se agravara y, segundo, para conseguir una solución que permitiera la restitución del tráfico lo antes posible.
De este modo, recordó, como siempre en permanente contacto con los dos ayuntamientos implicados, y de la mano de los técnicos, se llevaron a cabo unos primeros trabajos para garantizar la estabilidad de la estructura, procediendo al apuntalamiento del puente en ambos márgenes.
Martínez Allegue explicó como, una vez realizadas estas primeras intervenciones urgentes e inspeccionada al fondo la estructura, se pasó a la segunda fase.
Sobre esta segunda fase de los trabajos, la conselleira indicó como, ante la situación del puente, se decidió proceder al desmontaje controlado y a la construcción de un puente nuevo. Para hacer estos trabajos, añadió, se desmontó con cuidado cada elemento, de las barreras de hormigón o del esqueleto metálico, trabajos de desmontaje que terminaron en octubre del pasado año.
Señaló que en el mes de diciembre se iniciaban las cimentaciones del puente nuevo, y como en el proceso de construcción de la misma se respetó el desagüe existente. Ahondó como la estructura "se encajó entre las pilas que había y se optó por diseñar una celosía inferior en la que el propio cordón inferior sirve de paso peatonal, con un paseo de madera".
De este modo, tal y como subrayó Martínez Allegue, el puente respeta el paisaje existente y se acomoda perfectamente al lado del río.
Las tareas finalizaron con la habilitación de las cuestas de acceso de la pasarela peatonal, a la que se dotó de baranda y pavimento.
Finalmente, la conselleira hizo hincapié en la complejidad de los trabajos, también muy condicionados por la situación meteorológica, pero, aun así, unos trabajos que se finalizaron con agilidad y que supusieron una inversión por parte de la Xunta de 5,3 M€.
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