Santiago de Compostela, 28 de mayo de 2024

La Xunta ponen en valor los buenos resultados de la colaboración que desde el año 2010 mantienen el Laboratorio de Medio Ambiente de Galicia (LMAG) y el organismo hidráulico Augas de Galicia para la realización de muestreos y análisis y la aplicación de los índices de valoración necesarios para evaluar y garantizar el buen estado de las masas de agua superficiales.

Así lo destacó la directora xeral de Enerxías Renovables e Cambio Climático, Paula Uría, en el marco de una visita realizada esta mañana al edificio del LMAG en Pontevedra, que alberga una de las dos sedes que tiene el organismo en la comunidad.

Concretamente, explicó que las instalaciones localizadas en Lourizán se especializan en análisis biológicos y de vigilancia y control de calidad de las aguas naturales, mientras que la sede del laboratorio en la ciudad de A Coruña se dedica a realizar muestreos químicos de sustancias contaminantes y al control del aire ambiente.

En este sentido, la directora xeral destacó la importancia del trabajo que realiza el LMAG desde hace más de una década, tras integrar en el año 2010 en una sola unidad administrativa las funciones y la estructura de la Red de observación ambiental de Galicia, una herramienta al servicio de la Xunta integrada por un conjunto de estaciones que registran diferentes variables y permite incrementar el conocimiento de la dinámica de los ecosistemas y su interacción con los distintos tipos de actividades humanas.

En el caso concreto del laboratorio de Lourizán, las principales funciones y actividades que desarrollan sus técnicos consisten en la toma de muestras de las redes de control de la calidad de las aguas naturales superficiales continentales, costeras y de transición, análisis microbiológicos, identificación de distintos organismos biológicos y analíticas de nutrientes, parámetros muy útiles para conocer el estado ecológico en todas las masas de agua de competencia gallega.

Asimismo, junto con los técnicos de Aguas, también toman muestras y hacen análisis de cianobacterias en los embalses destinados a consumo de la demarcación hidrográfica de competencia autonómica (Galicia-Costa); realizan diagnosis de la recuperación ecológica de un curso de agua tras un vertido; y colaboran en el registro de especies invasoras y amenazadas, con el apoyo y la colaboración de la Dirección Xeral de Patrimonio Natural.

Todo este trabajo se tradujo solo durante el año 2023 en más de 131.000 actuaciones realizadas en la sede del LMAG de Pontevedra entre muestreos, diferentes tipos de análisis y mediciones in situ en el proceso de toma de muestras relacionadas con las aguas naturales de la comunidad.

Por eso y tras recordar que el próximo año toca firmar un nuevo convenio de colaboración con Augas de Galicia para seguir ejecutando los programas de control derivados de la Directiva marco del agua, la responsable autonómica avanzó que está previsto abordar la reconfiguración de la actual red de observación ambiental y mismo ampliarla a otros posibles ámbitos.

De hecho, los puntos de control, las frecuencias y los parámetros incluidos en el futuro convenio podrán variar en función de los resultados de la revisión del Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica de Galicia-Costa que está realizando el organismo autonómico.