Santiago de Compostela, 11 de marzo de 2024

El conselleiro do Medio Rural en funciones, José González, se reunió hoy por videoconferencia con representantes de Uniones Agrarias, Sindicato Labrego Galego, Asaga, Agaca y Fruga, las principales asociaciones profesionales agrarias de Galicia.  El objetivo de esta reunión fue a avanzar en la postura conjunta de Galicia delante del debate sobre el futuro de la PAC, en el marco de las reuniones técnicas que se están celebrando en Madrid entre el Gobierno y las comunidades autónomas para flexibilizar el Plan Estratégico de la PAC (Pepac) 2023-2027. 

Tal y como había anunciado el pasado viernes en rueda de prensa, José González mantuvo este encuentro con los representantes de los agricultores y ganaderos gallegos para avanzar en el diseño consensuado del documento que Galicia trasladará al Gobierno de España, como responde al posicionamiento del Ejecutivo en la negociación para flexibilizar el Pepac, y para lo cual también mantendrá esta semana una reunión de trabajo con sus homólogos de la Cornisa cantábrica (Asturias, Cantabria y País Vasco), con la misma finalidad de fijar una posición común en este proceso. 

Xunta y representantes de las organizaciones agrarias volvieron a coincidir en el encuentro de esta tarde tanto en la insuficiencia de las modificaciones propuestas hasta ahora por el Gobierno, del que se volvió a lamentar la falta de diálogo, como en la urgencia de reducir la carga burocrática que hoy soportan los agricultores y ganaderos derivada de la nueva PAC. 

En la reunión quedó clara la demanda común de gobierno autonómico y representantes de las entidades profesionales agrarias sobre cuestiones como la voluntariedad en el uso del cuaderno digital y la no aplicación de la normativa vinculada a la figura del veterinario de explotaciones. Ejemplos, remarcó el conselleiro del Medio Rural en funciones, de "una legislación comunitaria diseñada a espaldas del territorio, y que está imponiendo trabas a nuestros productores en lugar de trabajar para garantizar la viabilidad de un sector fundamental para el futuro de Europa". 

Adaptar el nuevo Pepac a las características de Galicia

En este sentido, a corto plazo, Xunta y organizaciones agrarias trabajarán para consensuar un posicionamiento común de cara al proceso de negociación de la Pepac 2023-2027, que se está desarrollando en estos momentos entre el Ministerio de Agricultura y las comunidades autónomas. 

El conselleiro en funciones remarcó que Galicia solicita al Gobierno flexibilizar la normativa comunitaria y que se ajuste a la realidad y a las peculiaridades del territorio gallego en concreto y de toda la Cornisa cantábrica en general. En este sentido, el conselleiro advirtió hoy que la propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), "con total claridad, no se adecúa a Galicia ni, por extensión, a las comunidades autónomas del Cantábrico". Así, señaló que el territorio gallego tiene unas condiciones muy específicas (minifundismo, pluviometría, tamaño de las explotaciones o tipos de suelo, entre otras) que exigen un rediseño concreto de determinadas medidas de la PAC, algo que -añadió- "hasta ahora no se está haciendo".

En la reunión de esta tarde, además de reducir la mencionada carga administrativa de las explotaciones, coincidieron en otras cuestiones como la necesaria modificación de los ecorregímenes y la llamada "condicionalidad reforzada" para adaptarse a la realidad gallega y no perjudicar a los agricultores y ganaderos gallegos. Una situación que ya había sido advertida al Gobierno a lo largo de la negociación de la nueva Pepac.

Trabajar por un posicionamiento común en cuestiones estratégicas para el futuro del campo

En paralelo, junto a la negociación de la flexibilización de Plan Estratégico de la PAC, las organizaciones agrarias también acercarán sus propuestas al amplio paquete de medidas que la Xunta quiere coordinar con estos agentes y el resto de las comunidades autónomas de la cornisa cantábrica, en cuestiones estratégicas para el futuro del campo -a nivel estatal y comunitario-.

Este documento cuenta con cuatro grandes bloques, comenzando precisamente por la solicitud de revisión de toda la normativa nacional derivada de las directivas europeas de la nueva PAC. En este primero bloque tiene un especial protagonismo la necesidad de reducir la burocracia impuesta a los agricultores y ganaderos, en cuestiones ya mencionadas como flexibilizar el cuaderno digital de las explotaciones o potenciar las asociaciones de defensa sanitaria ganadera frente a la figura del veterinario de explotación; o aligerar las inspecciones para facilitar el trabajo cotidiana de los productores. 

Además, otras reclamaciones de Galicia -incluidas en la segunda y tercera parte de este documento- y en las que también coincide con las asociaciones profesionales del campo gallego pasan por la exigencia de igualdad en relación con las reglas de juego en los mercados para todos los agricultores y ganaderos, de forma que en los tratados internacionales con terceros países se incluyan cláusulas espejo que garanticen ese mismo trato para todos los productos; además de urgir la modificación de la Ley de la cadena alimentaria para que se cumpla de una manera efectiva, introduciendo mecanismos como los diseñados por Galicia -Contacarne y Contaláctea-, y trabajar en coordinación con las CCAA  para que los precios que perciben los productores cubran sus costes, más el margen de beneficio correspondiente.

El gobierno autonómico gallego también plantea otros elementos estratégicos para el futuro del rural -como una fiscalidad favorable-, apelando al Gobierno en la necesidad de que sitúe al sector agroganadero en el centro de sus políticas, asumiendo el carácter de potencia agroalimentaria de España tanto en las políticas estatales como a nivel comunitaria, reclamando en Bruselas una moratoria urgente y temporal de las medidas europeas que están ahogando hoy a los agricultores y ganaderos, con el objetivo de realizar una reflexión estratégica sobre el futuro del sector que desemboque en el rediseño de las políticas cuestionadas, favoreciendo una introducción gradual en el territorio.