La Xunta finaliza una senda peatonal en Xesteira, en el ayuntamiento de Cerdedo-Cotobade, para mejorar la seguridad viaria en la carretera PO-233

La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Infraestructuras y Movilidad, acaba de finalizar las obras de construcción de una senda peatonal en Xesteira, en el Ayuntamiento de Cerdedo-Cotobade, con el objetivo de reforzar la seguridad viaria de la carretera autonómica PO-233 (Ponte Bora-Carballedo) a su paso por este núcleo rural.

El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López, y el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, supervisaron esta mañana el resultado de esta actuación, consistente en la construcción de un itinerario seguro de 280 metros de longitud entre los puntos kilométricos 5+630 y 5+910 de esta vía con una inversión de 48.000 euros.

“Esta zona de la parroquia cotobadesa de Almofrei es muy transitada por el vecindario para desplazarse entre las viviendas, acercarse hasta Arrotea y Borela o acudir a la playa fluvial, por lo que precisaba de esta solución para corregir ciertos problemas de visibilidad en el arcén y otorgar más seguridad a los peatones. Así, desde la Xunta la acometimos en el marco de nuestro proyecto global de incremento de la seguridad viaria de la red autonómica que, en esta comarca, también está beneficiando con mucha intensidad la otros trechos de los municipios de Pontevedra, Marín, Bueu, Poio o A Lama, entre otros”, detalló el representante gallego.

La actuación consistió en la construcción de una senda en hormigón coreado en terrizo en la margen izquierda de la carretera PO-233 con una anchura mínima de dos metros sobre una capa de 16 centímetros de grueso que se completó con un bordillo elevado diez centímetros sobre la plataforma de la calzada.

Asimismo, se procedió a la instalación de una baranda metálica para evitar caídas laterales de los peones y se acometió un importante cambio en el drenaje de pluviales que, hasta la fecha, estaba a cielo abierto y que fue ocupada para la construcción de esta acera. Como consecuencia de eso, se realizó una canalización subterránea que también contempló las correspondiente alcantarillas y pozos de registro.

Finalmente, el proyecto también incluiyó el traslado y reubicación de la marquesina de la parada de autobús y de los contenedores de recogida de la basura, el retranqueo de un espejo de seguridad para facilitar la salida de vehículos de uno cruce anexo y el repintado completo de las marcas viarias.