La Xunta moviliza cerca de 1.200 efectivos y 100 medios para la prevención y extinción de fuegos en la provincia de Pontevedra
El delegado territorial, Luis López, presentó el operativo para este verano en la sala de vigilancia del Servicio de Montes del edificio administrativo de Campolongo, que controla 26 cámaras de última generación en 13 localizaciones
La provincia contará con cuatro helicópteros con base en Silleda,Campiño y Mondariz, mantendrá los diez puntos de vigilancia fija con personal y dispondrá de casi 1.200 puntos de recogida de agua
Pontevedra, 15 de junio de 2022 La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Rural, va a movilizar 1.188 efectivos y 98 medios, entre los que figuran cuatro helicópteros, para la prevención y extinción de fuegos en la provincia de Pontevedra durante la época de alto riesgo, que quedará activada el próximo 1 de julio.
El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López, acompañado por el jefe territorial del Medio Rural, Antonio Crespo, y el jefe provincial de Prevención de Incendios, Manuel Francisco, presentó esta mañana el operativo para la provincia recogido en el Plan de prevención y defensa contra los incendios forestales de Galicia (Pladiga 2022) en la sala de vigilancia del Servicio de Montes del edificio administrativo de Campolongo.
“Desde la Xunta cada año el mejoramos el sistema, tan necesario para proteger a los ciudadanos, sus viviendas y nuestro valioso monte”, explicó el representante autonómico.
El operativo de la Xunta para la época de alto riesgo en la provincia de Pontevedra contempla un total de 1.188 profesionales, 94 motobombas y 4 helicópteros. Este despliegue se completa con el mantenimiento de los diez puntos de vigilancia fija con las bases aéreas de Silleda, Mondariz y Campiño y con 1.184 puntos de recogida de agua -de los que 116 son aptos para los helicópteros- estando previstos 23 nuevos este año.
Respecto al plan de prevención, la Xunta destina este año para el conjunto de Galicia un total de 33,1 millones de euros, lo que supone incrementar su dotación cerca de un 13% respeto del ejercicio anterior. En total, con esos fondos está previsto actuar en más de 58.600 hectáreas de terreno y en 5.780 kilómetros de pistas forestales y otras vías de toda la comunidad autónoma.
Por otra parte, este plan se complementa con medidas tendentes a corregir el abandono y poner en valor las zonas rurales y de monte de cara a recuperar superficie abandonada al amparo de la Ley de recuperación de la tierra agraria y del Plan de pastos. Así, ya se declaró la aldea-modelo de Parada-Muteira (Cerdedo-Cotobade) y se están recogiendo firmas para la de Porteliña (As Neves), se aprobó el polígono agroforestal de Vilalén-Tomonde (Cerdedo-Cotobade) y está delimitado y en fase de actuaciones previas al de Panascos (Tomiño) y se van a invertir 925.000 euros en planes de pastos en Deán (Cerdedo-Cotobade), Casteláns y Prado da Canda (Covelo), Meira (Moaña), Pinzás (Tomiño), Padróns (Ponteareas) y un lote diverso que beneficia a zonas de A Estrada, Campo Lameiro y Cerdedo-Cotobade.
También se mantiene la gestión de la biomasa en fajas secundarias a través del convenio de protección de las aldeas. En este caso, se priorizaron 26 parroquias, por su mayor riesgo, pertenecientes a los ayuntamientos de Arbo, Baiona, A Cañiza, Fornelos de Montes, Gondomar, Mondariz, Mos, As Neves, Poio, Ponteareas, Ponte Caldelas, Rodeiro, Soutomaior y Tomiño.
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