La Xunta ultima medidas para extender y completar los servicios bibliotecarios por todo el territorio

La hoja de ruta marca entre sus prioridades ahondar en la atención a las personas con discapacidad, en la digitalización y también en la formación del personal

El mapa muestra buenos resultados en indicadores como disponibilidad de salas infantiles, condiciones de apertura o recursos de alfabetización digital

Abren un promedio de 45 horas, cuentan con 6,6 millones de documentos, más de 17.000 puestos de lectura y más de 4.100 puestos informatizados, superando el promedio español
 

Santiago de Compostela, 27 de mayo de 2022

El director general de Cultura, Anxo M. Lorenzo, presentó hoy en el Parlamento el II Mapa de bibliotecas públicas de Galicia, la herramienta para diagnosticar necesidades y orientar la acción pública en este ámbito que fue aprobada esta semana en el Consello de Xunta. Como explicó, el documento constata la positiva evolución de estos centros en los últimos años, especialmente en lo que alcanza a la diversidad de servicios para acudir a las bibliotecas (plazas de aparcamiento, paradas de autobús...), a los materiales para el público infantil, las condiciones de apertura o recursos como wifi, puestos de lectura o las colecciones que ofrecen.

 

También se refirió a las líneas de futuro que fijó esta hoja de ruta especialmente a la necesidad de seguir trabajando en ámbitos como la atención a las personas con discapacidad, la digitalización o reforzar la cercanía para llegar la aquellos territorios que no cuentan con estos centros, un aspecto en el que, avanzó, la Xunta está ultimando distintas medidas que permitan extender el alcance de las bibliotecas.

 

“Disponer de un sistema bibliotecario fuerte y disponible para todos los gallegos es imprescindible porque las bibliotecas aseguran el derecho de acceso a la cultura. En este contexto, tener hojas de ruta como este nuevo mapa es fundamental para seguir avanzando”, expresó el representante de la Consellería de Cultura.

 

295 bibliotecas en 215 ayuntamientos

Se refirió a este documento como fruto de un trabajo “minucioso y exhaustivo” que permite ofrecer al conjunto de profesionales e instituciones responsables de los servicios bibliotecarios un “instrumento oportuno y útil” para la planificación y diseño de actuaciones futuras. Además, añadió, de cara a la ciudadanía proporciona información “de mucha utilidad” sobre la extensión y características de estos servicios.

 

El mapa identifica un censo total de 295 bibliotecas radicadas en 215 ayuntamientos que, como expresó, “serán completadas con nuevas medidas que iremos implementando entre todos”. Así, avanzó que la Xunta elaborará un documento estratégico que será debatido con el sector en la próxima reunión del Consejo Bibliotecario de Galicia y que incluirá iniciativas para llegar a los lugares en los que no tienen bibliotecas cuando las características del territorio lo aconsejen. También se abordarán mecanismos de cooperación entre ayuntamientos o la descentralización del servicio a través de nuevos centros que trabajen en red, entre otras cuestiones.

 

En lo que se refiere a la dotación de personal de las bibliotecas públicas es en general “adecuada o alta”, indicó. En concreto, hay más de 630 trabajadores a templo completo, el 30% técnico. Con el fin de aprovechar todo el posible estos recursos humanos se intensifican esfuerzos en su formación continua. Otro aspecto en el que las bibliotecas avanzaron son las colecciones. Con 6,6 millones de documentos, las dimensiones son también altas o muy altas. Ahora, además de la dimensión cuantitativa, se reforzará también la calidad, para lo cual hace falta “abordar estudios que permitan asegurar una colección óptima y completar el material en gallego”, expresó.


Equipación adaptada

Anxo M. Lorenzo se refirió igualmente a las políticas dirigidas a las personas con discapacidad como uno de los principales retos que identifica el mapa. Como recordó, se trata de un aspecto en el que la Xunta está trabajando ya a través de líneas de ayuda para la mejora de las infraestructuras y, con vistas al futuro, también en el marco de la futura ley autonómica de cultura inclusiva y accesible. El mapa identifica que, aunque la mayor parte de las bibliotecas tienen buenos resultados en cuanto a la adaptación física de los espacios (el 64% tiene mobiliario e infraestructuras adaptadas) es preciso ahondar en aspectos como la diversificación de las colecciones o la equipación, con medidas como lupas electrónicas, pasapáginas, monitores adaptados, recursos en braille, lectores de pantalla, entre otros.

 

“Todas las propuestas que se pongan en marcha deben abordarse desde una perspectiva integradora por eso también es necesario realizar evaluaciones profesionales de la accesibilidad de las instalaciones y equipaciones; valorar e incrementar los fondos accesibles y diversificar la colección, así como contar con un plantel capacitado en la atención a la discapacidad y a la diversidad”, añadió.

 

La diagnosis extraída en el II Mapa de Bibliotecas Públicas identifica otros avances en cuanto a los servicios generales. Uno de los más destacados es lo de la facilidad de servicios disponibles para acudir a las bibliotecas, un 99,5% de los ayuntamientos aprueban en este parámetro al estar dotados de aparcamientos propios lo contar con aparcamientos públicos próximos, tener descuentos para aparcamiento, paradas de bus próximas o aparcamiento de bicis y patines.

 

Las bibliotecas en cifras

Las bibliotecas abren un promedio de 45 horas semanales y tienen una superficie útil de más de 98.000 m2. Más de la mitad (el 53%) cuentan con una sala específica para el público infantil. Hay más de 17.000 puestos de lectura y más de 4.100 puestos informatizados o, lo que es el mismo, 1,7 puestos digitales por cada 1.000 habitantes. Se trata de una cifra por encima del promedio español donde el promedio está en 0,6 ordenadores de uso público disponibles en las bibliotecas por cada 1.000 habitantes. Además, los centros bibliotecarios se adaptan también cada vez más a los criterios de sostenibilidad ya que el 64% de las bibliotecas se adaptan a las soluciones de ahorro energético.

 

Anxo M. Lorenzo recordó que la adaptación al entorno digital será otro de los retos. “Requiere de una continua innovación para que estos centros no queden fuera de la realidad por lo que, además, ahora reforzaremos nuestros esfuerzos para que las bibliotecas jueguen un papel primordial en la lucha contra la brecha digital y en la alfabetización digital”, indicó.  Para el representante de la Consellería de Cultura, el II Mapa de Bibliotecas de Galicia sirve para poner de manifiesto las fortalezas y carencias de los servicios bibliotecarios de la red y, en consecuencia, reviste una especial utilidad para fijar prioridades y objetivos de hacia el futuro. “Hace falta ahora que tanto las entidades responsables de los servicios bibliotecarios como la Xunta tengamos en cuenta estos contenidos a la hora de llevar a cabo su planificación estratégica”, indicó.

 

2 M€ para las bibliotecas

El II Mapa de Bibliotecas de Galicia actualiza y amplía la elaborada en 2016. El primer mapa de las bibliotecas de Galicia se convirtió en una herramienta útil para mejorar el sistema bibliotecario y era precisa ahora una actualización, como marca la Ley de Bibliotecas. Fue elaborado por la Consellería de Cultura, Educación, FP y Universidades, a quién le corresponde la dirección y coordinación de la Red de Bibliotecas de Galicia. Se enmarca en las medidas de la Xunta para el sector bibliotecario con un presupuesto que supera los 2 M€ en distintos programas. Así, se incluyen medidas para el crecimiento y actualización de las colecciones y dotación de recursos electrónicos, para la dinamización de la lectura, para la mejora de infraestructuras culturales de los ayuntamientos o para la formación.

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