La Xunta hace un balance "agridulce" de la Conferencia Sectorial de Agricultura y pide al Ministerio "más valentía" a la hora de actuar frente a venda a pérdidas

La Xunta hace un balance “agridulce” de los resultados de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural celebrada ayer en Madrid. Así, el Gobierno gallego considera positiva la propia convocatoria de esta reunión -y así se lo agradeció públicamente el conselleiro del Medio Rural al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA)-, pero continúa pidiendo “más valentía y arrojo” a Madrid a la hora de adoptar medidas urgentes y extraordinarias para atajar la situación de venta a pérdidas generalizada en los sectores primarios.

En este sentido, Galicia apoya las peticiones que va a hacer el Gobierno central delante de la UE -y que coinciden en parte con las que ya llevaba la Xunta la esta reunión-, pero sale “decepcionada” por la poca disposición de Madrid a actuar en su marco de competencias. Así, el titular de Medio Rural insiste en que el Gobierno gallego hará “el que tenga que hacer” dentro de sus competencias, pero que hace falta ese dinamismo por parte del MAPA para garantizar la sostenibilidad de un sector estratégico en Galicia y en España, como es el ganadero.

Huelga del transporte

En primer lugar, cuanto al más preocupante, que es la paralización de la actividad en el sector primario (y particularmente en el lechero) por la huelga del transporte, la Xunta muestra su sorpresa delante de las declaraciones de ayer del ministro Planas, en lo que hablaba de problemas puntuales”. Llama la atención esta valoración, cuando todo el sector -ganaderos, fabricantes de piensos y cooperativas- trasladaron al propio conselleiro que están registrando problemas serios para desarrollar su trabajo y cuando la propia Federación nacional de industrias lácteas anunció que paraliza su actividad por este motivo.

En esta línea, el Gobierno gallego insiste en reclamar al central medidas urgentes, dentro de sus competencias en la materia, porque los animales no pueden esperar y precisan alimentos todos los días, además de ser ordeños. Por eso, en el caso del alimento es esencial que los camiones lleguen a las granjas para facilitarlo y en el caso de la leche es preciso que se garantice su recogida. Por lo tanto, no se puede esperar a 29 de marzo para tomar medidas. Al tiempo, se siguen demandando otras actuaciones, como la inmediata bajada de impuestos de los carburantes y de otros insumos claves para el sector primario. Medidas que hace falta adoptar ya, porque se trata de productos perecederos.

Venta a pérdidas

Además, el conselleiro del Medio Rural, José González, reitera la reclamación al MAPA para que actúe de inmediato en el sentido de hacer efectiva la prohibición de la venta a pérdidas en el sector. En esta línea, González recuerda que este problema viene ya de atrás, a pesar de que se agravó con la invasión rusa de Ucrania. Galicia consensuó con las demás comunidades de la Cornisa cantábrica (Asturias, Cantabria y País Vasco) un paquete de medidas que considera urgentes y necesarias y que tienen que ver con cinco ámbitos de actuación: dotar de liquidez a las explotaciones; evitar el desabastecimiento de cereal; conseguir la subida de los precios pagados en origen a los ganaderos; ampliar las superficies destinadas a la plantación de cereales y mejorar la situación de los agricultores y ganaderos en materia fiscal.

En esta estrategia, el conselleiro advirtió que algunas de estas medidas son competencia directa de la Administración General del Estado y que otras dependen de Bruselas, pero tienen que ser trasladadas desde Madrid, porque la interlocución con la UE le corresponde al Estado. Así, a la hora de desgranar las actuaciones propuestas por Galicia, el conselleiro celebró que ya se habían tomado por parte de la UE iniciativas para evitar el desabastecimiento de cereales y que el Ministerio se había comprometido a seguir en la línea de favorecer la importación de estos productos desde terceros países, como pueden ser Argentina o Brasil. En parecidos términos, la Xunta también considera positivo el anuncio del ministro de favorecer la plantación de cereales y oleaginosas en terrenos en barbecho o en las superficies de interés ecológico. Eso, advirtió el conselleiro, era algo que también pedía Galicia para paliar, precisamente, la situación de desabastecimiento. Otra cuestión también trasladada desde la Xunta y que se abordó en esta Conferencia Sectorial fue la de pedir que se flexibilice la PAC para que se recurra a fondos Feader que no estén utilizados con el fin de habilitar ayudas directas, como ya se hizo durante la pandemia.

Sin embargo, hay otras cuestiones que Galicia propone y que no fueron atendidas, como las medidas “enérgicas” en el ámbito fiscal y laboral, las destinadas a dotar de liquidez a los agricultores y ganaderos y -la más importante-, la de hacer cumplir la prohibición de venta a pérdidas y que se respete la Ley de la cadena alimentaria.

Cuanto a las medidas fiscales, Galicia reclama actuaciones ambiciosas, porque se se considera “estratégico” el sector ganadero, hace falta una auténtica reforma en este ámbito, según el conselleiro. Algo que se debería recoger en un proyecto de ley específico, una propuesta que Galicia apoyaría y, de hecho, ya tiene una antología de acciones para proponer.

En el que alcanza a las medidas directas, el conselleiro trasladó al ministro que las de liquidez aprobadas para hacer frente a la sequía son “totalmente insuficientes”. Así, advirtió que solo en el sector de vacuno de leche y de carne el incremento de los costes de producción se puede cifrar en el entorno de los 300 millones de euros y que por lo tanto hablar de cien millones de euros para toda España no es suficiente en absoluto. En este mismo sentido, José González señaló que las líneas de liquidez avaladas por la Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria (Saeca) tienen que estar territorializadas, ser sencillas de conceder y llegar a todos los ganaderos que las habían necesitado. Galicia pide también que por parte del Banco de España o de la autoridad comunitaria competente se autorice a las entidades financieras una moratoria de un año en la amortización de los préstamos a largo plazo que tengan vivos los ganaderos, algo que también se hizo la causa de la pandemia del covid-19. En la misma línea, se reclama también el anticipo de la PAC, acompañado de un régimen de ayudas para que esta medida no había tenido un coste añadido a los agricultores y ganaderos.

Costes de producción

Con respeto a la venta a pérdidas, el conselleiro señaló que esta situación se esta a dar desde el año 2021, no tanto por la invasión rusa de Ucrania como por el incremento de los costes de producción. Así, González puso de manifiesto que en el vacuno de leche de Galicia hubo una subida de cuatro céntimos, pasándose de 36 a 40 céntimos el coste de producir un litro de leche, mientras que el precio de la leche en enero de 2022 está en 35,9 céntimos. En el vacuno de carne, según los datos de la Xunta, el incremento del coste de producción se sitúa alrededor de un euro por kilo de carne producida. Esto supone que todo el sector entró en pérdidas, que van a ser mucho mayores este año la causa de la invasión rusa de Ucrania, advirtió el conselleiro. Por eso, la Xunta reitera su llamada al MAPA para que promueva un gran acuerdo nacional con la distribución, la industria y los ganaderos y que traiga consigo un incremento de los precios de los productos de los ganaderos. Esto, mediante una prima de emergencia excepcional, temporal, que puede ser perfectamente compatible con las normas de la competencia y que evite que este ámbito productivo entre en muchas dificultades cuanto a su sostenibilidad económica.

En este mismo sentido, se reclaman controles y suficiente dotación presupuestaria que permitan a la administración autonómica garantizar el cumplimiento de esa prohibición. Así, tanto Galicia como el País Vasco le transmitieron al ministro que están creando sus observatorios de la cadena alimentaria y que es preciso que la normativa nacional recoja que sus informes puedan acreditar el coste de producción, para que los ganaderos puedan negociar con la industria. Esto, porque hacer ese control contrato a contrato es prácticamente inviable -solo en Galicia se habla de 7.000 contratos-, por lo que hace falta utilizar dicho informes para comprobar esta cuestión. Por último, el conselleiro matizó que los ganaderos no piden solo ayudas directas, que también, sino que se le pague por sus productos el precio que corresponde. Sobre estos temas en particular, el conselleiro lamentó que el ministro había respondido “con palabras, pero no con hechos ni con medidas concretas y urgentes”.