La Xunta avanza en la construcción de la red de caminos principales de la parcelaria de Brandariz, en Vila de Cruces
El presupuesto para la ejecución de estos trabajos asciende a 1,1 millones de euros y el plazo para llevar a cabo estas obras finaliza en julio de 2023
Esta parcelaria está reorganizando una superficie de casi 1.000 hectáreas, repartidas en más de 8.300 parcelas iniciales propiedad de 575 vecinos
La Consellería de Medio Rural tiene un presupuesto de unos 12 millones de euros para seguir trabajando en los procesos de concentración parcelaria a lo largo del presente año
La Consellería de Medio Rural sigue trabajando en la zona de concentración parcelaria de Brandariz-Obra-Sector Brandariz, en el ayuntamiento pontevedrés de Vila de Cruces, con el inicio de las obras correspondientes a la red principal de caminos. La ejecución de estos trabajos tiene un presupuesto consignado de 1,1 millones de euros y una duración estimada de año y medio, es decir, hasta el mes de julio de 2023.
Esta parcelaria, que está actualmente en fase de bases definitivas, está reorganizando una superficie de casi 1.000 hectáreas, repartidas en más de 8.300 parcelas iniciales propiedad de 575 vecinos. Con la puesta en marcha de este proceso, se busca una mejora de la estructura territorial de las explotaciones de la zona y, por tanto, una merma en sus costes de producción.
Para este año 2022, la Xunta tiene un presupuesto de unos 12 millones de euros para seguir trabajando en los procesos de concentración parcelaria, puesto que son una herramienta fundamental para paliar el minifundismo presente en la comunidad gallega, desde el punto de vista de la estructura de la propiedad. Así, a día de hoy quedan 94 procesos abiertos, pero en 57 de ellos los vecinos ya pueden hacer uso de las nuevas parcelas, y otros cinco que se decretaron en el año 2021 en los ayuntamientos de Outeiro de Rei, Ordes, Friol y Castro de Rei.
Además, a través de la nueva Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia se seguirán impulsando estos procesos al tiempo que se apuesta también por instrumentos de movilización voluntarios que permitan una mayor participación de los interesados en la explotación de las tierras, como son los polígonos agroforestales, las agrupaciones de gestión conjunta de la tierra, la iniciativa de las aldeas modelo o las permutas de especial interés agrario, entre otras. Precisamente, ya se declaró el inicio de los dos primeros polígonos agroforestales de iniciativa pública en Galicia, concretamente en los municipios ourensanos de Oímbra y Cualedro.