El Consello da Xunta aprueba el PRUX del Parque Natural de Corrubedo que regulará los usos y conservación de este espacio con una inversión de 6,5 M€ en la próxima década

Será el quinto de estos instrumentos de gestión que se adopta en los últimos años, después de los del Parque Nacional de las Illas Atlánticas de Galicia y los de los parques naturales de la Serra da Enciña da Lastra, de O Invernadeiro y de Monte Aloia

El objetivo de esta herramienta es conservar la diversidad geológica y biológica en sus diferentes componentes y paisajes, para asegurar sus dinámicas naturales

El PRUX establece tres tipos de zonificación para las casi 1.000 hectáreas del parque, reservando para la de uso general cerca de un 6%

Santiago de Compostela, 26 de mayo de 2021

La El Consello da Xunta, tal y como había avanzado la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivienda, Ángeles Vázquez, aprobó hoy el primer Plan rector de usos y gestión (PRUX) del Parque Natural de Corrubedo y lagunas de Carregal y Vixán, que regulará las actividades y la conservación de este espacio y que ya prevé una inversión de 6,5 millones de euros durante la próxima década.

De este modo, Corrubedo se convierte en el quinto parque natural gallego que cuenta con un plan de gestión, siguiendo la estela iniciada por el Parque Nacional marítimo-terrestre de las Illas Atlánticas de Galicia (2018), Serra da Enciña da Lastra (2019), O Invernadeiro (2019) y Monte Aloia (2020).

Los valores fundamentales de esta herramienta de uso y conservación, además de su vigencia, son el reajuste de las unidades de zonificación, con la que avanzar también en la unidad de referencia que se toma como referencia en toda la red de parques naturales de Galicia; la inclusión de un programa de actuaciones, basado en cuatro ámbitos, con medidas e iniciativas; y un plan de emergencias -el primero para este parque natural- para optimizar la utilidad de todos los recursos técnicos y humanos disponibles, para controlar de forma más rápida la evolución de una emergencia y minimizar las consecuencias.

Con esta herramienta, se actualizará la normativa que regula en la actualidad, un Plan de ordenación de recursos naturales, y se da cumplimiento a la Ley de patrimonio natural y de la biodiversidad de Galicia, que recoge que los parques y reservas naturales deberán regularse con un plan rector y fijar medidas de gestión necesarias para compatibilizarlos con la conservación de estos espacios.

En el caso de Corrubedo, el PRUX establece para las suyas casi 1.000 hectáreas tres zonificaciones distintas, reservando una superficie de cerca de un 6% para uso general. El objetivo es conservar la diversidad geológica y biológica en sus diferentes componentes (hábitats y especies), los paisajes, así como aquellas componentes que contribuyan a la conservación y al mantenimiento de los procesos ecológicos esenciales de la dinámica de este espacio.

Tres ámbitos de usos y conservación

Con la finalidad de facilitar la interpretación de manera rápida e intuitiva, la zonificación propuesta para este parque natural diferencia entre:

- Zona I de uso limitado (565,43 hectáreas). Está constituida por aquellas áreas que requieren de una mayor protección. En la misma se diferencian: un área litoral, que incluye la gran duna móvil y los otros hábitats dunares y costeros, excepto la playa; y un área de lagunas y marismas, donde destacan las lagunas de Carregal y Vixán y los hábitats higrófilos que las envuelven y las prolongaciones de los mismos en la transición hacia las áreas de cultivos.

Esto implica que el uso público queda restringido a las áreas designadas para paso, observación y fotografía y educación ambiental, y también serán autorizables los aprovechamientos de los recursos marinos y las labores tradicionales. No obstante, quedan prohibidas las instalaciones, construcciones y obras no indispensables para la gestión del parque, el tránsito de animales domésticos (excepto los perros de guía y rescate) o la navegación recreativa, surf y variantes.

- Zona II de uso compatible (374 hectáreas. Incluye las playas comprendidas entre el núcleo urbano de Corrubedo y punta Corbeiro, y las áreas de paisaje agrario tradicional y cultivos forestales, en las que se localizan hábitats prioritarios o de interés comunitario, o hábitats de especies de interés para la conservación.

Las prohibiciones que se estipulan en esta zona son la construcción de edificios o ampliación de los existentes; la plantación de especies forestales alóctonas y las talas a matarrasa de frondosas autóctonas; actividades deportivas, como windsurf, kitesurf y similares, por lo que las pruebas y competiciones deberán ser autorizadas por el parque; el empleo de maquinaria; y los acceso de animales -excepto en los casos previstos en la Zona I-.

Por el contrario, estarán permitidas las actuaciones de mantenimiento de las construcciones existentes en los núcleos rurales, los usos agrarios de carácter tradicional y el aprovechamiento de recursos marinos.

- Zona III de uso general (56,82 hectáreas). Integrada por los terrenos desnaturalizados por la actividad humana o en los que se genera una actividad antrópica elevada, como parcelas de uso residencial, equipaciones e infraestructuras de uso público, que se sitúan en el límite interior del Parque.

En este caso, en aquellas zonas con clasificación de núcleo rural, las actuaciones urbanísticas y de dotación de servicios estarán sometidas a las ordenanzas municipales, se permitirán los usos agrarios tradicionales y las tareas de gestión de biomasa en las bandas primarias y secundarias.

En definitiva, el PRUX de Corrubedo analiza y sintetiza toda la normativa existente en este espacio físico para concentrarla en un único documento, y clarifica todas las actuaciones posibles y usos permitidos y autorizables para todos los agentes implicados en el espacio natural, así como las prohibiciones.

Singularidad del parque

El sistema dunar de Corrubedo es, sin duda, el símbolo identificativo de este parque natural, único en toda la geografía y con la mayor duna móvil de Galicia. No obstante, es el lugar de cobijo de un representación muy rica y variada tanto de flora como de fauna.

Destaca la vegetación de las playas y de los sistemas dunares, que albergan unas 200 especies de fanerógamas (plantas con semilla), algunas incluidas en los catálogos de plantas endémicas, raras o amenazadas a nivel gallego y otras con un valor florístico o bioxeográfico singular.

También es estacable la presencia de reptiles y anfibios, como el sapo de espuelas (Pelobates cultripes) y la abundancia de endemismos ibéricos: la salamadra rabilarga (Chioglossa lusitanica), el lagarto verdinegro (Lacerta schreiberi) y la lagarta gallega (Podarcis bocagei), así como la tortuga europea (Emys orbicularis).

Asimismo, Corrubedo es un área de importancia para las aves, no sólo durante las migraciones, sino también como zona de reproducción e invernada, pues acoge regularmente especies infrecuentes o de distribución muy localizada. Destacan las poblaciones nidificantes, en arenales y dunas, de dos especies de limícolas (que viven en el limo o en el lodo) amenazadas en Galicia, como el alcaraván común (Burhinus oedicnemus) que tiene aquí uno de sus pocos puntos de cría y el único situado actualmente en la costa, y el chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus).

En el caso de los mamíferos, se inventariaron dos especies de murciélagos amenazadas: el murciélago de herradura grande (Rhinolophus ferrumequinum) y el murciélago de herradura pequeño (Rhinolophus hipposideros); y son frecuentes el zorro (Vulpes vulpes), el tejón (Meles meles), el erizo (Erinaceus europaeus), la ardilla (Sciurus vulgaris) y el jabalí (Sus scrofa); así como la nutria (Lutra lutra), que mantiene una presencia común tanto en la costa como en las lagunas.

Otro de los valores del Parque son sus paisajes, en las que se distinguen tres zonas diferenciadas: el paisaje litoral, conformada por las playas, dunas, estuarios, marismas y lagunas, que consiguen un gran desarrollo; el paisaje agrario, sobre todo en la parte interior del territorio, donde predominan los elementos propios, como las pequeñas parcelas separadas por muros de piedra y setos vegetales; y el paisaje antropizada, presente en la periferia y en la que, partiendo de núcleos rurales tradicionales, fueron apareciendo asentamientos más recientes y de carácter lineal, ligados a la disposición de las carreteras, y que representan el proceso de transformación paisajística más importante del ámbito.

Cuatro ámbitos de actuación

El Plan rector de usos y gestión también establece un programa de actuaciones a desarrollar en los próximos diez años para conocer, mantener y mejorar los valores naturales y los componentes ecológicos valiosos del parque natural.

Entre las acciones a desarrollar destacan la conservación de la biodiversidad, patrimonio cultural y paisaje; estudios, seguimiento y evaluación de fauna, flora, hábitats y otros; acciones informativas, de divulgación y señalización y de educación ambiental; y, por último, conservación y mejora de la red viaria y de las instalaciones, con el mantenimiento de infraestructuras, vehículos y maquinaria.

Por último, hay que destacar que para la elaboración del documento definitivo de este Plan, la Dirección General de Patrimonio Natural aceptó total o parcialmente un 92% de las aportaciones recibidas.

En definitiva, la aprobación del PRUX de Corrubedo se enmarca en el proceso de actualización normativa que está impulsando la Xunta en todos los parques naturales de Galicia, a lo que se prevé que próximamente se sumen con la misma herramienta los dos que restan: Baixa Limia-Serra do Xurés —este año— y Fragas do Eume —en 2022—.