Valeriano Martínez critica la discrecionalidad del Gobierno central en el reparto de los fondos para luchar contra la pandemia y denuncia que Galicia tendría que recibir 660 millones más

El conselleiro de Hacienda y Administración Pública, Valeriano Martínez, criticó hoy la discrecionalidad del Gobierno central en el reparto de los fondos para luchar contra la pandemia y denunció que Galicia tendría que recibir 660 millones de euros más de los que lleva percibidos.

Y en este sentido, pidió el apoyo de todos los grupos parlamentarios de la Cámara para demandar que en los recursos vinculados al Plan Nacional de Recuperación, Transición y Resiliencia “se corrija esta discriminación a Galicia”.

Valeriano Martínez compareció hoy en el Pleno del Parlamento gallego para informar sobre el avance del resultado del cierre del año 2020 y del gasto ocasionado por la pandemia del coronavirus en ese ejercicio.

Durante su intervención, el conselleiro explicó que los recursos procedentes de la Unión Europea son una pieza fundamental “y una oportunidad si realmente el Ejecutivo central cuenta con las comunidades autónomas y permite el acceso a esos fondos en igualdad de condiciones, pero no todas las comunidades están siendo tratadas por igual”, apuntó.

Así, apeló a la necesidad de una cogobernanza real entre el Gobierno de España y las CC.AA. y lamentó que el Gobierno central “lleve muchos meses perjudicando a Galicia en el reparto de todos los fondos que se habilitan para la lucha contra la pandemia”.

Gasto extraordinario derivado del covid

Durante su exposición, el conselleiro de Hacienda y Administración Pública, Valeriano Martínez explicó que la pandemia supuso en el 2020 un gasto extraordinario para la Xunta de 629 millones de euros, con un esfuerzo adicional para la Administración Autonómica de 90 millones, ya que tuvo que gastar esa cantidad por encima de los recursos recibidos.

En cuanto al desglose por áreas, de estos 629 millones de euros, 270,3 millones –la mayor parte- se destinaron a la Sanidad; 115,8 millones a Educación; 70,2 millones de euros fueron para el refuerzo de las políticas sociales; y finalmente, 53,7 millones se destinaron a empleo.

El 2020 fue un año excepcional en el que el Ejecutivo gallego tuvo que tomar medidas presupuestarias extraordinarias con una triple prioridad: la sanitaria, la económica y la social. En este sentido, ya en el mes de marzo aprobó un Plan de Tesorería con 1.800 millones de euros para dotar de liquidez a la tesorería de la comunidad y ayudar a las familias y empresas; creó un Fondo Covid-19 para poder financiar los gastos adicionales vinculados a la pandemia en el SERGAS y en los servicios sociales; y aprobó un Plan de reactivación y dinamización para movilizar más de 3.000 millones.

A esto hay que añadir que de manera inmediata, el Gobierno gallego decidió suspender los plazos de las autoliquidaciones de los impuestos de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, de los impuestos de Sucesiones y Donaciones y de los tributos del Juego porque según apuntó el conselleiro, “con una caída de ingresos tan extraordinaria teníamos la responsabilidad de proporcionar a la ciudadanía facilidades para cumplir sus deberes y optamos por diferir los pagos tributarios”.

Líderes en esfuerzo inversor y pago a proveedores

Valeriano Martínez subrayó que en un año excepcional, Galicia mantuvo sus fortalezas habituales y señaló que “en el 2020 lideró el esfuerzo inversor de toda España, encabezamos el gasto que crea riqueza para las empresas y para las familias gallegas”. De hecho, fue la Comunidad Autónoma con mayor peso de las inversiones sobre el total del gasto no financiero, con un 13,5%, casi el doble que el promedio, que fue del 7,2%.

Por otra parte, la Xunta fue un año más, la administración autonómica más ágil en el pago a sus proveedores. Galicia pagó en un promedio de 18,7 días –la mitad de tiempo que el conjunto de comunidades- a sus más de 14.800 proveedores. En un año con muchas dificultades de liquidez para las empresas, el importe pagado por la Xunta alcanzó los 3.380 millones de euros en un total de 606.827 facturas.

Control del déficit y de la deuda

El conselleiro explicó también que en el 2020, año en el que se suspendieron las reglas fiscales, Galicia cerró el año con un déficit del 0,1% del PIB. El Gobierno gallego gastó todo el necesario para atender todo el relativo a la pandemia y al mismo tiempo controló el déficit y la deuda.

Además, la comunidad cerró el 2020 con un diferencial de deuda con el promedio autonómico de 7,2 puntos, el máximo de la serie histórica, según los datos publicados por el Banco de España, y fue la tercera comunidad de régimen común con menor endeudamiento, con un 19,9% de ratio deuda/PIB, frente al 27,1% del promedio de las CC.AA. “Y esto se traduce en beneficios para los ciudadanos, ya que cada gallego y cada gallega deben 2.160 euros menos que promedio de ciudadanos del resto de CC.AA.”, apuntó.

Finalmente, Valeriano Martínez subrayó que en todo momento, las tres prioridades del Gobierno gallego fueron combatir la pandemia, impulsar la reactivación económica y atender las necesidades de las familias, pymes y autónomos.