La Xunta subraya el papel clave de Meteogalicia en la lucha contra el cambio climático y como referente científico en el Estado

La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, subrayó esta mañana la labor fundamental realizada por Meteogalicia desde su puesta en marcha en el año 2000 hasta convertirse en todo un referente climatológico y científico, tanto a nivel autonómico como nacional.

Durante una visita con motivo del Día meteorológico mundial a la plataforma oceanográfica instalada a un lado de la isla de Cortegada, la única de estas características que existe en Galicia, Vázquez Mejuto recordó que a día de hoy solo hay tres comunidades que cuentan con un servicio de información meteorológica propio –Galicia, Cataluña y País Vasco-, una apuesta realizada por la Xunta hace ya 20 años y que hoy sigue teniendo su mejor aval en un gran equipo de profesionales y en las infraestructuras más punteras.

En este sentido, recordó que la red de observación meteorológica gallega en tierra dispone en la actualidad de 157 estaciones de registro y un total de 1.104 sensores repartidos por todo el territorio, gracias a los cuales Meteogalicia puede obtener todo tipo de parámetros, medidos cada 10 minutos y accesibles para el conjunto de la ciudadanía a través de su página web.

Asimismo y tras subrayar que el Día meteorológico mundial que se celebra mañana tiene este año como lema El océano, nuestro clima y el tiempo, la conselleira se refirió también al importante papel que tiene la plataforma de Cortegada, una instalación que visitó hoy junto a varios altos cargos de la Consellería del Mar; la directora general de la Calidad Ambiental, Sostenibilidad y Cambio Climático, Sagrario Pérez; y técnicos de Meteogalicia.

Al respecto, subrayó que se trata de una infraestructura única, instalada en el año 2007, que permite instalar sistemas de medida de variables tanto meteorológicas cómo oceánicas, en este último caso, la diferentes profundidades. Además, recordó que la plataforma se integra en la red oceanográfica de la Xunta, integrada también por cinco boias localizadas en Muros, Ribeira, A Guarda, Rande (Vigo) e Islas Cíes.

Una década de colaboración en materia oceanográfica

La secretaria general técnica de la Consellería del Mar, Silvia Cortiñas, destacó por su parte la trascendencia de contar con una herramienta útil de observación de la dinámica meteorológica costera como es el Observatorio Costero gallego, una amplia red de estaciones de observación en la que colaboran desde hace un decenio a Consellería del Mar -a través del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino de Galicia (Intecmar) y del Centro Tecnológico del Mar (Cetmar)- y la Consellería de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, a través de Meteogalicia.

Silvia Cortiñas subrayó también el compromiso de la Xunta con la protección y la conservación de los mares para que Galicia y su sector marítimo-pesquero sean referentes en la lucha contra el cambio climático e incidió en que la Consellería del Mar, a través del Cetmar, ya desarrolló proyectos como el Climathon o el Climefish con la finalidad de evaluar este fenómeno.

Además recordó que la Comisión Europea trabaja en una estrategia conjunta de adaptación al cambio climático en la que se incluyen tanto la pesca como la acuicultura, en la línea también marcada en clave autonómica por la Estrategia Gallega de Cambio Climático y Energía 2050, aprobada por la Xunta la finales del año 2019.

A este respecto, Ángeles Vázquez también incidió en la importancia de conmemorar el Día meteorológico mundial para, por una parte, crear conciencia sobre el papel clave que la meteorología y la hidrología tienen para garantizar el equilibrio medioambiental entre la acción humana y la conservación del planeta y, por otra, contribuir a la búsqueda de una solución global al problema del cambio climático.

En este sentido, destacó el acierto de dedicar este año la efeméride a los océanos, que cubren el 70% de la superficie terrestre y ejercen un papel fundamental como suministradores de recursos y servicios básicos, pero también por su influencia en la meteorología y como factor regulador del clima y, por tanto, clave en la estrategia frente al cambio climático.