La Xunta entrega a 8 ayuntamientos de la provincia de Ourense material para mejorar la capacidad de respuesta frente a las nevadas

El delegado territorial de la Xunta en Ourense participó esta mañana en el Polígono de Barreiros en la entrega de esparcidores de sal a las Agrupaciones de Voluntarios de Protección Civil (AVPC) de los ayuntamientos de Baños de Molgas, Barbadás, Cortegada, Maceda, Muíños, Petín, A Pobra de Trives y Xunqueira de Ambía

El representante del Gobierno gallego destacó que la Xunta considera una prioridad que los efectivos de emergencias cuenten con el material adecuado para realizar sus intervenciones con mayor eficiencia y seguridad

Gabriel Alén subrayó que esta orden de ayudas se enmarca en el esfuerzo que está realizando el Gobierno gallego en los últimos años para mejorar y reforzar los medios de emergencias de los municipios de la comunidad, con una inversión que supera los 14 millones de euros

Ourense, 05 de febrero de 2021

El delegado territorial de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, participó esta mañana en el Polígono de Barreiros en la entrega de esparcidores de sal a las Agrupaciones de Voluntarios de Protección Civil (AVPC) de los ayuntamientos de Baños de Molgas, Barbadás, Cortegada, Maceda, Muíños, Petín, A Pobra de Trives y Xunqueira de Ambía, que resultaron beneficiarios de la orden de ayudas del Gobierno gallego para equipaciones de emergencias, dotada con 932.400 euros.

Los ayuntamientos adjudicatarios están incluidos en el Plan Nega (Plan de Nevadas de Galicia) que tienen una altitud media por arriba de los 500 m. y resultan ser los más castigados por heladas y nevadas, lo que hace muy necesario este material para mantener la viabilidad en las vías de comunicación de titularidad municipal.

El delegado territorial destacó que la Xunta considera una prioridad que los efectivos de emergencias cuenten con el material adecuado para realizar sus intervenciones con mayor eficiencia y, sobre todo, con seguridad, trabajando en las mejores condiciones posibles y con la mejor equipación. También señaló “la imprescindible labor” de los voluntarios de estas agrupaciones complementando a los servicios municipales en los dispositivos para “atender a los vecinos en el día a día” en estos meses marcados por la pandemia de la covid-19.

El material de emergencias cedido a los ayuntamientos incluye, además de las 37 tiendas de campaña para emergencias, 12 remolques, 8 vehículos todo terreno tipo pick-up, 4 UTV (Utility Task Vehicle), 12 cuchillas para retirada de nieve, 12 esparcidores de sal y 4 embarcaciones neumáticas de salvamento y rescate.

Esta orden de ayudas se enmarca en el esfuerzo que está realizando el Gobierno gallego en los últimos años para mejorar y reforzar los medios de emergencias de los municipios de la comunidad, con una inversión que supera los 14 millones de euros.

Características técnicas

Los esparcidores de sal entregados disponen de una capacidad de 300 litros y permiten un esparcimiento regulable que puede llegar a los 5 m. de anchura. Vienen preparados para ser ajustados a vehículos todo terreno o remolques, o bien unidades de remolque. Poseen un depósito de polietileno con un bastidor metálico con protección anticorrosiva; son accionados por motor eléctrico de 12 v y de 1/2 hp con conexiones eléctricas resistentes al agua, y están montados sobre un eje de transmisión y disco en acero inoxidable con sellado especial contra el agua.

Gastos de funcionamiento de las AVPC

En esta línea, el Diario Oficial de Galicia, publicó el pasado 19 de enero la convocatoria de subvenciones que permitirá sufragar los gastos de funcionamiento de Agrupaciones de Voluntarios de Protección Civil en municipios de menos de 50.000 habitantes, y a las que la Xunta destina 340.000 euros, manteniendo así la inversión de la orden anterior.

La ayudas podrán destinarse a necesidades como equipación y uniformes; equipos de prevención y protección, siempre que se trate de material fungible; costes de actuaciones llevadas a cabo por la agrupación, mantenimiento, transporte, o conservación y alquiler de la base; pago a seguros de accidentes y responsabilidad civil del personal voluntario; costes de formación de sus miembros; o equipación de material informático y de comunicaciones.

La Xunta atribuida además por la formación en el ámbito de las emergencias mediante los distintos cursos y actividades dirigidas a los voluntarios a través de la Academia Gallega de Seguridad Pública (AGASP).

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