La Xunta impulsará la variante de la carretera PO-510 en O Porriño con el fin de mejorar la movilidad de los vecinos de Budiño y del entorno

Francisco Menéndez traslada la disposición de la Xunta de ejecutar este ambicioso proyecto que supone replantear la red viaria de la zona, ejecutando la nueva variante de la carretera para la conexión directa con la A-55

Destaca que el siguiente paso será licitar la redacción del proyecto de trazado de toda la actuación que supondrá una inversión estimada de 27 M€, con una primera fase de 6 M€, por lo que se estudiará su financiación con fondos de reconstrucción
 

Santiago de Compostela, 16 de noviembre de 2020

La Xunta impulsará la variante de la carretera PO-510 en O Porriño con el fin de mejorar la movilidad de los vecinos de Budiño y de otros municipios limítrofes como Salceda de Caselas o Salvaterra de Miño. El Gobierno gallego estudiará una posible financiación de esta actuación a través del mecanismo de recuperación y resiliencia de la Unión Europea.

El director de la Agencia Gallega de Infraestructuras, Francisco Menéndez, mantuvo esta mañana una reunión de trabajo con el teniente de alcalde de O Porriño, Pedro Pereira, a quién le trasladó la disposición del Gobierno gallego de ejecutar este ambicioso proyecto, que supone replantear la red viaria de la zona, ejecutando la nueva variante de la carretera para la conexión directa con la autovía A-55, Vigo-Tui.

Francisco Menéndez explicó que esta opción permitiría eliminar el tráfico interurbano en los tres primeros kilómetros de la vía, de manera que los dos primeros darían servicio a las canteras y al polígono y el tercero facilitaría la movilidad de los vecinos de Budiño.

La Xunta incorpora al proyecto a solicitud del Concello do Porriño de eliminar un ramal paralelo a la PO-510, entre sus puntos kilométricos 2 y 3, y aprovechar el viario interior del polígono.

Según trasladó el director de la Agencia Gallega de Infraestructuras, el siguiente paso será licitar la redacción del proyecto de trazado de toda la actuación, que supondrá una inversión importante, estimado en un total de 27 M€, con una primera fase de 6 M€, de ahí que la Xunta estudiará una posible financiación de esta actuación a través del mecanismo de recuperación y resiliencia de la Unión Europea.

Francisco Menéndez avanzó que, mientras se avanza en la tramitación del proyecto de la variante, la Agencia Gallega de Infraestructuras estudiará posibles medidas a corto plazo para la mejora de la seguridad viaria del trecho inicial de la PO-510.