La Xunta se suma a las demandas de los productores de planta ornamental y flor cortada y de otras comunidades para reclamar al Estado ayudas directas al sector

El Gobierno gallego insta al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación a defender en Bruselas unas empresas que acumulan pérdidas superiores a los 440 millones de euros por  la crisis de la covid-19

Santiago de Compostela, 5 de junio de 2020

La Xunta se suma a las demandas de los productores de planta ornamental y flor cortada, así como de otras comunidades autónomas, para reclamar al Estado ayudas directas para este sector afectado por la emergencia sanitaria. En concreto, el Gobierno gallego apoya la causa de otras comunidades autónomas, de la Asociación Gallega de Cooperativas Agrarias (Agaca) y de las organizaciones del sector, incluidas las de Galicia, que remitieron sendas cartas al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación instándolo a aprobar aportaciones urgentes para paliar la crisis derivada de la covid-19.

La Xunta considera que el reglamento de la Comisión Europea por el que se autorizaron medidas para la estabilización del sector de las plantas vivas y flores cortadas se quedó corto, a pesar de reconocerse su marcado carácter estacional, centrado en primavera. Así, señala que el cierre de los establecimientos durante el confinamiento impidió la venta para eventos o el turismo, las adquisiciones por parte de particulares para, por ejemplo, acondicionar sus segundas viviendas y también la venta para la plantación en parques y jardines.

En esa línea, el Gobierno gallego destaca que España fue el país de la Unión Europea más perjudicado, al ser el único en el que las tiendas de flores y viveros estuvieron cerradas dos meses. Por lo tanto, no se entiende que este sector tan castigado por la pandemia -que acumula pérdidas superiores a los 440 millones de euros- no disfrute de ningún régimen de ayuda sectorial y tenga tan poco respaldo financiero en el reglamento de ejecución de la Comisión Europea.

Así, ante la preocupación en la materia, la Xunta reclama estas aportaciones en beneficio de pequeñas y medianas empresas y explotaciones y pone de relieve el esfuerzo del sector, que se concentra en la producción y suministro para atender el grueso de las ventas en pocos meses. La inversión en medios y mano de obra –añade- ya estaba muy avanzado cuando a mediados de marzo la crisis sanitaria puso fin a la campaña de comercialización, dejando en suspenso a multitud de operadores.

A mayores, el Gobierno gallego señala que la demanda española y comunitaria se mantiene al alza por lo que si se pierden operadores en el país, será en beneficio de otros Estados miembros, que están demostrando -apunta- un gran compromiso institucional con sus productores, como es el caso de los Países Bajos, de ahí la importancia de implementar medidas directas que palíen la situación económica de este sector.