La Xunta incide en la necesidad de prestar atención psicológica a las personas más vulnerables durante el confinamiento por el coronavirus

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, mantuvo esta mañana una reunión por videoconferencia con representantes del Colegio Oficial de Psicología de Galicia, sobre la evolución de este servicio que se lleva a cabo a través del teléfono 112

Profesionales del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes de Emergencias (GIPCE) atienden las 24 horas del día desde el pasado lunes casos de ansiedad y soledad derivados de las restricciones del Estado de Alarma

Alfonso Rueda destacó la importancia de atender y dar respuesta con este servicio a los “perjuicios emocionales” causados por esta situación de aislamiento
 

Santiago de Compostela, 11 de abril de 2020

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacó hoy la importancia de prestar asistencia psicológica a las personas que lo precisen, en especial a las más vulnerables, para atender las consecuencias psicológicas derivadas de las restricciones del Estado de Alarma y de la situación de emergencia sanitaria por el coronavirus.

Así lo señaló esta mañana tras una reunión por videoconferencia con la presidenta del Colegio Oficial de Psicología de Galicia, Rosa Álvarez, y con la coordinadora del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes y Emergencias (GIPCE), Ana Núñez, para evaluar la evolución del servicio de atención psicológica a través del teléfono de las emergencias 112. “Una de los frentes en la lucha contra el coronavirus tiene que ver con los perjuicios emocionales causados por el confinamiento y que reciben respuesta de la Xunta con este servicio”, explicó.

El servicio, puesto en marcha el pasado lunes en colaboración con el Colegio Oficial de Psicología de Galicia, atendió en sus primeros días en funcionamiento llamadas de personas con ansiedad o que se sienten solas por el aislamiento social, que son los casos más frecuentes entre los recibidos. Entre las preocupaciones de la ciudadanía también destaca el miedo al contagio de la enfermedad y al futuro cuando finalice el Estado de Alarma.

Con esta iniciativa, las llamadas son atendidas a través del 112 las 24 horas del día por profesionales del GIPCE, que cuentan con formación específica en psicología de emergencias. Casi el 80% de las personas que hicieron uso de este servicio en sus primeros días en funcionamiento fueron mujeres y, en su mayoría, en la franja de edad de 50 a 70 años, que concentra más de la mitad de las llamadas.

En cuanto al origen de los usuarios, destaca el ayuntamiento de Vigo, a lo que le siguen las localidades de A Coruña, Ferrol y Ourense. Además, las provincias de A Coruña y Pontevedra suman casi el 90% de los casos recibidos.

Una vez inscrita la llamada, el 112 deriva la solicitud de atención psicológica a alguno de los profesionales del Colegio Oficial de Psicología, que se encarga de realizar la intervención y, según el caso, valorará la posibilidad de hacer una nueva derivación la otro profesional o continuar a hacer un seguimiento.
Alfonso Rueda incidió en que la prolongación del confinamiento con la finalidad de contener el coronavirus está aumentando la vulnerabilidad de la población debido a la falta de contacto y aislamiento social. En esta línea, explicó que con el servicio de atención psicológica a través del teléfono de emergencias 112 se contribuye a dar respuesta a las nuevas demandas surgidas de la evolución del coronavirus. Añadió que “en algunos casos también se pide ayuda y asesoramiento para otros familiares que necesitan atención para que se contacte con ellos”.
 

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