Román Rodríguez apuesta por declarar Bien de Interés Cultural el yacimiento de Adro Vello

El conselleiro de Cultura y Turismo, Román Rodríguez, visitó hoy con el alcalde de O Grove, José A. Cacabelos, y diferentes representantes vecinales, el Adro Vello, un importante yacimiento arqueológico sito al borde de la playa del Carreiro, en la parroquia de San Vicente. Román Rodríguez destacó la privilegiada ubicación de este bien “con una gran potencialidad vinculada al turismo cultural” para el conjunto del Salnés, y valoró positivamente iniciar los estudios previos necesarios para proceder a la incoación de su declaración de Bien de Interés Cultural (BIC).

A preguntas de los periodistas, el titular de Cultura y Turismo recordó la importante huella xacobea del yacimiento, aludiendo a la moneda de Adro Vello, una pieza del siglo XII que representa la traslatio apostólica. Y calificó este espacio patrimonial como “un punto estratégico de la tradición xacobea que es necesario potenciar y mejorar con vistas a la celebración del Xacobeo 2021”. Asimismo, agradeció “la implicación el compromiso y la complicidad de todos”, señalando que la declaración de BIC tiene que ser el primer paso para mejorar este enclave en el que todas las administraciones competentes, nominalmente, la Xunta, el Ayuntamiento, la Diputación y el Estado, se alíen para ponerlo en valor.

Adro Vello fue objeto de varias actuaciones arqueológicas de excavación entre 1983 a 1990, bajo la dirección de José Carro Otero. Con posterioridad, fue objeto de diversos proyectos de limpieza, consolidación y mantenimiento de los restos puestos a cielo abierto. En los últimos quince años, diversas administraciones acometieron actuaciones destinadas a su mantenimiento, limpieza y puesta en valor. El yacimiento se extiende por debajo de la carretera, y no esta previsto continuar las excavaciones en el momento actual, sino continuar con las labores de conservación y puesta en valor.

Se trata de un yacimiento complejo, donde se constata una ocupación desde época romana hasta el siglo XVIII. Entre los restos encontrados destacan la factoría de salazón de los siglos I-III, la villa romana (III e IV d.C.), la necrópolis, que tiene una cronología que se extiende desde la época tardorromana hasta la Edad Moderna, una iglesia del siglo VII y una torre defensiva medieval.